Ya te has ido y apenas me ha dado tiempo a disfrurtate.
Llegas ligero como la niebla, y sin embargo tu luz es única.
Tienes un brillo especial. Me haces sentir viva y especial.
Y sin embargo, ya te has ido. Sin dejarme despedirme, sin ni siquiera un hasta pronto.
Sé que este momento llegaría, es inevitable.
Debes irte, pero no puedo evitar desear que te quedes aquí para siempre, a mi lado, dándome tu calor.
Me encanta como me abrazas por las mañanas, y sentir tu aliento por las noches.
Y apenas he tenido tiempo para disfrutarte.
Te echaré mucho de menos, no lo dudes.
El único consuelo que me queda es saber que volverás puntual, como siempre lo has hecho, dentro de 9 meses. No te preocupes, te esperaré, querido verano.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario